Si tienes un negocio, autónomo o empresa, es probable que ya te hayas topado con la fauna más peculiar del ecosistema empresarial: los morosos. Esa especie escurridiza, maestra del escapismo, que a la hora de pagar una factura impagada, saca a relucir un repertorio de excusas de morosos digno de un Oscar. Desde el clásico «ya te hice la transferencia» hasta argumentos que desafían la lógica, estos cuentos no solo nos roban dinero, sino también la paciencia y el sueño.

Pero no te preocupes, en RedClaimer estamos aquí para ayudarte a desenmascarar a estos artistas de la evasión y, con un toque de humor y sarcasmo, darte las herramientas para cobrar lo que es tuyo. ¡Porque el humor, a veces, es la mejor arma contra la frustración!

El Repertorio Infalible de Excusas de Morosos (y cómo rebatirlas)

Prepara tu detector de falacias, porque aquí viene el top de excusas de morosos y cómo responderles sin perder la compostura (demasiado):

1. «Ya te hice la transferencia / El banco se ha equivocado»

Ah, el clásico entre los clásicos. La transferencia fantasma, el dinero que se desvanece en el ciberespacio. ¡Qué misterio!

2. «No me ha llegado la factura / El correo se la ha comido»

Aquí el deudor juega a ser el pobre despistado, víctima de un servicio de mensajería ineficiente o de un email con hambre.

3. «No tengo dinero ahora mismo / La situación está fatal»

El argumento de la crisis, el pobrecito que no puede pagar. A veces es verdad, otras… es una actuación digna de Hollywood.

4. «No estoy contento con el servicio/producto / No es lo que esperaba»

De repente, el deudor se convierte en un crítico experto y, oh, sorpresa, el servicio que antes alababa ahora es la peor experiencia de su vida.

5. «Hablé con PEPITO y me dijo que no hacía falta pagar»

El deudor intenta escudarse en un tercero, a menudo un empleado que «no está» o «ya no trabaja aquí».

La Nueva Ley de Eficiencia Procesal: Amistad y Eficacia

La flamante Ley de Eficiencia Procesal, aunque suene muy «legal», nos viene a decir algo muy simple: antes de ir a juicio a liarla parda, intenta hablar. Promueve la mediación y la conciliación como vías prioritarias. Esto refuerza la importancia de la vía amistosa que hemos estado destacando. Para las excusas de morosos, significa que tienes un respaldo legal para insistir en una solución negociada antes de escalar el problema. Es una invitación a la cordura antes de la batalla campal.

¿Y si el Moroso es Extranjero? ¡Que el Derecho Internacional no te asuste!

Aquí es donde la cosa se pone picante. Si tu deudor es internacional, las excusas de morosos pueden venir con acento y una dosis extra de complejidad legal. Pero no entres en pánico.

El Valor de la Persistencia (y de no caer en sus redes)

Las excusas de morosos pueden ser agotadoras. Tocan el punto de dolor del acreedor: la impotencia, la frustración de ver tu dinero esfumarse. Pero la clave es la persistencia, la documentación impecable y saber cuándo pedir ayuda. No permitas que el ingenio de un deudor te arrebate lo que te pertenece.

En RedClaimer, sabemos que lidiar con las excusas de morosos no es plato de buen gusto. Por eso, te ofrecemos las herramientas y el soporte para que puedas concentrarte en tu negocio, mientras nosotros nos encargamos de desenmascarar esos «cuentos» y hacer que tus facturas impagadas se conviertan en dinero real. ¡Porque al final, el único cuento que queremos oír es el de tu éxito!